Valencia, 13 de febrero de 2007. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) advierte de que, ante el anuncio de Geslive de que realizará una “fuerte inspección” en las plantaciones y almacenes comercializadores de la variedad Afourer-Nadorcott, esta empresa no está autorizada a realizar inspecciones sobre propiedades privadas, ya sea rústicas pertenecientes a agricultores o urbanas donde están ubicadas las firmas comercializadoras, sin una autorización legal. Por este motivo, AVA advierte que, sin el consentimiento de estos propietarios, la entidad tendrá que acudir a la vía judicial o administrativa para realizar los controles que ha anunciado.

La organización agraria también aclara que, a pesar de las “permanentes e injustificadas” llamadas de ilegalidad lanzadas por esta empresa, la única acción legal de la que hay constancia corresponde a la demanda interpuesta por un productor, que ya ha sido admitida a trámite por el Juzgado nº 2 de lo Mercantil de Valencia con nº de procedimiento 63/2007. En ésta se alega que la entidad exigió el pago de un royaltie por unas plantaciones anteriores a octubre de 2004, cuando todavía no contaba con el título de protección vegetal que le permitía reclamar un canon por los derechos de la variedad. En cambio, no se tiene conocimiento de que dicha empresa haya entablado alguna acción judicial, ni civil ni penal, contra algún productor en relación con la Afourer-Nadorcott.

En cuanto al anuncio de Geslive de facilitar a una asociación de productores la lista de fincas licenciadas, AVA advierte que esta transferencia de información podría atentar contra las “Condiciones de Regularización” suscritas por los productores de la variedad citrícola, en las que la empresa está obligada a garantizar la “confidencialidad de toda la información a la que pueden tener acceso a consecuencia del proceso de regularización solicitado”, así como contra la legislación de protección de datos.