A partir de hoy, el mercado de productos italianos de porcino acogidos a Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) se va a ver desbastecidos. El motivo es que los ganaderos de porcino se han puesto en huelga con el fin de protestar por la crítica situación por la que atraviesa el sector, con elevados costes de producción y precios bajos.

Los ganaderos de porcino van a dejar de certificar el origen y calidad de sus animales, lo que es una condición imprescindible para que los productos cárnicos obtenidos de dichos animales se comercialicen bajo las DOP correspondientes. En consecuencia, en el mercado, tanto italiano como en el de exportación, van a escasear productos como los jamones de Parma, San Daniele y Toscano, salamis de Brianza, Varci, Vicenza y Piacenza, así como el salami de carne de caza.

Los ganaderos denuncian que los precios en 2007 han bajado un 8% en relación con el año anterior, mientras que el coste de los cereales y la soja ha crecido de forma vertiginosa.