El ejército de EEUU dispara a cerdos, con el fin de que éstos sirvan de heridos con los que los soldados puedan ejercitarse para realizar prácticas de salvamento, como si los cerdos fueran potenciales heridos en el campo de batalla. El objetivo es que los soldados se familiaricen con las heridas de balas y puedan realizar, si fuera necesario, primeros auxilios a sus compañeros heridos durante una batalla, en la que no hay médicos.

La organización en defensa de los animales PETA ha mostrado su oposición a esta práctica por considerarla inhumana. En su opinión, debería ser sustituída por simuladores humanos de alta tecnología.

El portavoz de la 25 División de Infantería del Ejército de EEUU ha considerado que la utilización de cerdos era la mejor opción disponible y ha puntualizado que los cerdos no han sufrido debido a que han estado anestesiados todo el tiempo. La 25 División no ha proporcionado datos sobre el número de cerdos involucrados, donde se han adquirido y las armas utilizadas.