El Director General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural del MARM, Jesús Casas, defendió ayer, en el Congreso Nacional del Medio Ambiente (CONAMA), una visión integradora de la nueva Política Agraria Común (PAC) a partir de 2013, donde el futuro del territorio rural pase por una alianza entre todos los sectores, tanto conservacionistas del medio ambiente como productores agroalimentarios.

Durante su intervención en la sesión técnica “Agricultura y sostenibilidad rural post 2013”, Jesús Casas ha asegurado que no se puede hacer conservación de la biodiversidad al margen de las políticas sectoriales, en particular de la Política Agraria Común (PAC), que es la que maneja el territorio, y vivecersa, es decir, que no se puede hacer política agraria sin la visión ambiental que requiere la actividad sobre el territorio.

En referencia a la última comunicación de la Comisión Europea sobre la reforma de la Política Agraria Común, Jesús Casas ha afirmado que estamos ante un cambio sustancial, y se ha mostrado a favor de un enfoque de la nueva PAC en el que primen las exigencias mediambientales en cuanto a calidad ambiental y sostenibilidad, ya que esta visión es la que está legitimada por la sociedad europea, que demanda la primacía de estos criterios ambientales.

En este sentido, el Director General ha dicho que Europa debe ser ambientalmente sostenible y la la agricultura, pegada al territorio, debe adaptarse a estas exigencias, porque no se puede prescindir del derecho a tener un medio ambiente de calidad.

Por otra parte, el Director General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural se ha referido a los conceptos de equidad y reconocimiento en la aplicación de las ayudas económicas destinadas a los agricultores, al considerar que no solo hay que reconocer el precio de los productos conforme a los mecanismos de mercado, sino también el valor inmaterial que tienen, ya que el medio rural debe recibir una compensación por el valor de los servicios ambientales que presta a toda la sociedad.

Para concluir, Jesús Casas ha indicado que el futuro del medio rural no reside exclusivamente en la agricultura, aunque esta actividad es un componente muy importante para su desarrollo, y ha asegurado que la supervivencia del medio rural está ligada a una visión territorial, en la que los distintos modelos de producción agraria más o menos intensivos inciden en mayor o menor medida sobre los recursos naturales.