La escasa cosecha de trigo 2012/13 en Argentina fue producto de una baja intención de siembra, motivada principalmente por la necesidad de evitar mercados intervenidos, así como unos excesos de lluvias que dieron lugar a rendimientos muy bajos, similares a los de la década del 80, y a la peor calidad comercial de los últimos 15 años.

La producción de trigo 2012/13 habría sido de 9,1 millones de toneladas según el Ministerio de Agricultura argentino y de 9,6 Mt según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Este volumen permitiría contar con un pequeño saldo excedente, de 715.000 a 1.230.000 toneladas según fuente, tras abastecer al consumo interno y a las exportaciones y antes del ingreso de la próxima cosecha, según los datos del

En el análisis de la campaña de trigo hay que considerar el factor calidad. Además de haberse obtenido una magra producción, la calidad resultó baja. También hay considerar los lotes con alta presencia de Fusarium, que no se podrán usar por no ser aptos para el consumo humano.

Los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) creen que es muy poco probable que haya en el mercado una cantidad suficiente de trigo de alta calidad para mezclar con el que se encuentra fuera de estándar.

Los altos precios de las últimas semanas impulsaron a liquidar los saldos remanentes tras la cosecha. Según el CREA mingún buen empresario agrícola se quedaría con trigo pudiendo comercializarlo hoy a un valor equivalente al doble de lo que se ofrece para fin de 2013.

Actualmente, el trigo en el mercado argentino es de 450-500 $USA/tonelada. Según el CREA, esta situación se podría solucionar importando trigo del mercado mundial. El precio del trigo en Uruguay es de 280 $/tn. En caso de importar desde el Hemisferio Norte, los precios en la Argentina serían 395 dólares por tonelada trayéndolo desde el Golfo de México y 350 dólares desde los países que rodean al Mar Negro.