La actual ola de calor también ha llegado a EEUU y en especial al suroeste del estado de Kansas, donde se estima que muchas cabezas de ganado han muerto por estrés térmico. Se han registrado temperaturas elevadas, que han subido de manera muy rápida. Hace unos días, la temperaturas rondaban los 20-26º y de un día para otro, alcanzaron los 40ºC. Además, llovió, por lo que los niveles de humedad llegaron hasta el 35%, a lo que se unió que apenas ha habido viento que ayudara a refrescar. En consecuencia, los animales no han tenido tiempo para aclimatarse, han ido acumulando calor y no han tenido la posibilidad de poder disiparlo por la noche porque no ha habido refrigeración nocturna, lo que les ha provocado la muerte en algunos casos.

En cuanto al número de muertes de ganado por calor, no hay una cifra clara. Se habla de pérdidas de entre 100 a 500 cabezas perdidas por corral .Según el Departamento de Agricultura de Kansas, las muertes de ganado son del orden de 2.000 cabezas, sin embargo, hay publicaciones especializadas que barajan cifras entre 5.000 a 10.000 animales. En cualquier caso, aunque sea una cifra elevada hay que tener en cuenta que en Kansas hay censados 6,5 ​​millones de cabezas de ganado vacuno.