El resultado de las elecciones presidenciales el pasado domingo en Argentina va a tener una gran importancia en el sector cerealista, no solo de cara al mercado argentino sino también al internacional, debido al importante papel que en éste juega el grano argentino.

Durante los 12 años que ha durado la presidencia de los Kirchner, se ha mantenido una política muy proteccionista, estableciendo retenciones a la exportación de cereales, es decir, la aplicación de un impuesto a la exportación para desincentivarla y evitar la inflación de los precios domésticos.

Con la elección del nuevo presidente, Marcelo Macri, se espera que esta situación cambie y que las tasas a la exportación de cereales bajen o se eliminen, con lo que la exportación resultaría atractiva y el grano almacenado en Argentina podría empezar a salir de los silos hacia el mercado mundial. A nivel de precios, la tendencia iría al alza en el mercado argentino, mientras que en el mercado mundial, la mayor oferta generaría presión a la baja.

No obstante, hay que tener en cuenta que hasta el próximo 10 de diciembre, Marco Macri no toma posesión. Luego tendría que legislar al respecto, por lo que, como muy pronto, en enero es cuando podría empezar a salir grano.