La Lonja Agropecuaria de León, que ayer miércoles celebró su sesión ordinaria, da por finalizada la campaña más difícil que se recuerda en la recolección de girasol, debido a las inclemencias del tiempo. La Lonja considera que para explicar la evolución de la campaña hay que remontarse al mes de septiembre cuando se empezó a segar a buen ritmo y de repente las persistentes lluvias que se alargaron hasta mediados de octubre hicieron que hasta primeros de noviembre no se acabase la cosecha, una cosecha que habitualmente no se alarga más de 15 días.

En cuanto a precios la estabilidad ha sido la nota predominante, ya que durante todo este tiempo no ha habido apenas oscilaciones moviéndose la cotización entre 295 y 300 euros tonelada; con rendimientos por hectárea normales, en secano unos 1.100 kg/ha y en regadío sobre 3.000 kg/ha.

En la provincia de León se han sembrado 4.514 ha de secano y 2.536 ha de regadío. El número de hectáreas en secano es estable respecto al año pasado, pero no así, las de regadío, que ha descendido. El motivo es que el girasol es un cultivo poco exigente en cuanto al riego. El año 2012 fue extremadamente seco y las siembras de regadío estuvieron muy condicionadas por los volúmenes embalsados de agua en los pantanos, lo que condicionó que aumentase la superficie sembrada de girasol frente a otras alternativas. Sin embargo en el 2013 no hubo problemas en los embalses por lo que se volvió a superficies más acordes con años anteriores.

En el sector de los cereales ligera bajada de la cebada y el maíz que pasan a cotizar a 162 €/Tn y 174,50 €/tn respectivamente. El trigo repite a 178 €/tn y el centeno y la avena a 150 €/tn; se sigue cosechando a buen ritmo el maíz secadero y los datos que se manejan a día de hoy prevén buenos rendimientos.