El cierre del Gobierno Federal de EEUU está teniendo un enorme impacto en la política y la economía internacional, pero también en el sector agrario. El cierre ha afectado al Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), el cual ha dejado de funcionar, aunque se siguen manteniendo servicios, como las inspecciones de carnes y granos, los servicios anti-incendios de bosques, se siguen alimentando a los animales de los laboratorios, se continua concediendo los cupones de ayuda alimentaria, entre otros. Sin embargo, lo que el USDA no va a producir son estadísticas.

La página web del USDA se encuentra fuera de servicio y los informes estadísticos que el USDA produce y cuelga en su web no están disponibles. La semana próxima estaba prevista la publicación del Informe mensual de previsiones de cosechas del USDA (informe WASDE). Este informe es siempre muy esperado por los operadores de grano tanto de EEUU como del resto de los países, y tiene una gran repercusión en los mercados. Según sus estimaciones de cosecha varíen al alza o a la baja en comparación con el informe precedente, los precios de los cereales en la Bolsa de Chicago, que es un referente internacional para el precio del grano, fluctúan en consecuencia. Algunos operadores del mercado del grano ya han mostrado su preocupación por este hecho.

El USDA tampoco va a poder producir el informe semanal del estado de las cosechas ni sus informes de exportación, que tienen una gran repercusión en las variaciones de mercado.