El ministro de Economía de Francia, Bruno Le Maire, ha aparecido en un programa de la televisión francesa, anunciando que el gobierno está trabajando para incentivar a la gran distribución a configurar una cesta de la compra, compuesta por 20 artículos de primera necesidad, para que se vendan al menor precio posible y así, ayudar al consumidor a hacer frente a la inflación.

Preguntado si no sería mejor bajar el IVA, Le Maire ha respondido que una bajada del IVA no asegura que el precio final del producto baje y que esa rebaja favorezca a la distribución y no al consumidor, que es el objetivo.

Para la Federación francesa de Productores de Leche, la idea propuesta por el Gobierno es surrealista y solo sería comprensible si se pusiera en marcha un mecanismo similar para los ganaderos, es decir, un conjunto de insumos básicos ganaderos a precios bajos.

Por su parte, la gran distribución se opone ferozmente a la idea y asegura que fomentará la inflación. La mayoría de las principales cadenas minoristas ya han difundido un comunicado de prensa conjunto denunciando que se impulsaría dramáticamente el aumento de los precios.