La UE ha lanzado un proyecto de investigación para desarrollar nuevos métodos de producción de bioetanol que sean más eficientes, de cara al compromiso de reemplazar en 2010 un 5,75% del combustible fósil en el transporte por biocarburantes.

El proyecto NILE (New Improvement for Lignocellulosic Ethanol) pretende obtener bioetanol de forma rentable de fuentes como la paja o los residuos de maderas, que son mucho más baratos que los granos de cereal o el azúcar con los que se produce el bioetanol actualmente.

Las prioridades del proyecto son desarrollar nuevas enzimas que degraden la celulosa en azúcares, desarrollar nuevas cepas de levaduras que conviertan en etanol todos los tipos de azúcares presentes en la biomasa y mejorar la integración fabril, reduciendo la cantidad de energía necesaria para la transformación.

La iniciativa de este proyecto parte del Instituto de Tecnología de Suecia y del Instituto Francés del Petróleo, y cuanta con una financiación de la UE de 12,8 millones € en cuatro años. NILE es el único proyecto sobre etanol financiado por al UE dentro del Sexto Programa Marco de Investigación.