Si Japón no tenía suficiente con la aparición de nuevos casos de la gripe aviar, ahora tienen la sospecha de que su cabaña porcina pudiera estar afectada por la Peste Porcina Clásica (PPC), según la información del Ministerio de Agricultura japonés. Esta enfermedad no se detecta en Japón desde hace más de diez años.

La explotación sospechosa se encuentra en la prefectura de Kagoshima, que es la prefectura con mayor censo porcino de todo Japón, con una producción de 2 millones de cerdos anuales. La posible afección se detectó al analizar una muestra de 6 cerdos de los 98 que se despacharon de la explotación al matadero.

Los test iniciales han mostrado que en 40 de 44 cerdos analizados tiene anticuerpos a la PPC aunque no se ha detectado el virus. Estos anticuerpos pueden proceder de vacunación preventiva, que la explotación terminó en noviembre de 2000 o de la propia enfermedad.