22 de febrero de 2008. UPA-PALENCIA ha mantenido a primeras horas de la mañana de hoy un encuentro en Valladolid, en la sede de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), para abordar con los máximos responsables del organismo de cuenca la situación hídrica tan crítica que sufren los embalses de cara a la campaña de riego para los cultivos.

Nuestra organización ha pedido garantías para la campaña de riego en unos momentos donde los productores tienen que decidir la siembra de un cultivo tan imprescindible como es el de la remolacha. Sin embargo la respuesta de la CHD lejos de ser convincente es más bien preocupante. A día de hoy no garantizan ni el trasvase de Riaño ni se comprometen a que exista posibilidad de dar el visto bueno a la campaña de riego.

Además han apuntado que la Comisión de junta de explotaciones no se reunirá hasta finales de marzo, lo que supone un gravísimo quebranto para los remolacheros de la cuenca del Carrión, que no saben a qué atenerse ante el futuro Plan de reestructuración y el hipotético cierre de la fábrica de Peñafiel.

En este sentido UPA exige máximo rigor y responsabilidad a las administraciones, y debido a esta situación tan crítica de los embalses pedimos que de cara a la reestructuración remolachera, que aún no se ha hecho oficial, no entre esta campaña en el periodo de referencia para las ayudas al cultivo.

UPA tiene claro que no se puede condenar a los afectados por los problemas de riego en la zona de Carrión, que además pesa sobre sus cabezas el posible cierre de la factoría de Peñafiel.

En una situación de incertidumbre como la actual, nuestra organización exige un esfuerzo de responsabilidad del Mapa y de la Junta para que los remolacheros no pierdan las ayudas, y se vean arruinados si siembran, dado que no se les garantiza en estos momentos de inicio de siembra la posibilidad de regar sus parcelas dentro de unas semanas.