La Ministra de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, presentó ayer el libro «Félix Rodríguez de la Fuente. Su vida, mensaje de futuro», escrito por el periodista Benigno Varillas, que constituye la primera biografía autorizada del naturalista, con la que se conmemora el 30 aniversario de su muerte. Durante su intervención, la Ministra ha destacado que Félix Rodríguez de la Fuente supo transmitir, a través de la palabra y la imagen, su entusiasmo, su fascinación y su infinita curiosidad por conocer los secretos y los resortes que mueven la naturaleza. Esa misma energía vital, ha dicho la Ministra, le hizo rebelarse contra una vida convencional a la que parecía encaminado.
Elena Espinosa ha indicado que ese interés por la naturaleza comenzó a forjarse en su infancia, en las conversaciones que mantenía con el zapatero del pueblo, y maestro ornitólogo, y en las andanzas por la cueva de La Verana, desde donde atisbaba a los pastores con sus rebaños de ovejas y carneros, que, según palabras del propio naturalista, «olían a lana mojada e historia antigua».
Elena Espinosa ha añadido que esa preocupación por las relaciones entre el hombre y el medio quedaron plasmadas en el título de una de sus series más exitosas: «El hombre y la Tierra». Esas relaciones, ha dicho la Ministra, que a veces son conflictivas y generan problemas ambientales y que en otras ocasiones se construyen en armonía, fueron observadas por Félix Rodríguez de la Fuente, que como buen naturalista, mostró su preocupación por la desaparición de los usos tradicionales, a la vez que advertía de los problemas ambientales derivados del abandono del pastoreo extensivo.
Por eso, y adelantándose a su tiempo, Rodríguez de la Fuente proponía ya entonces que los responsables de la conservación de la naturaleza empezaran a pensar en introducir nuevamente ganado para evitar la degradación de los biotopos en aquellos espacios en donde haya desaparecido.
La Ministra ha recordado que el naturalista se trasladó a geografías remotas para encontrarse con nuevas expresiones de la vieja relación entre el hombre y la tierra. Fruto de todas esas experiencias y reflexiones, ha dicho Elena Espinosa, empezó a emerger en su cabeza un salto de escala: la necesidad de afrontar la conservación de la naturaleza desde un ámbito global. Precisamente, ha apuntado la Ministra, unos días antes de partir hacia el que habría de ser su último y fatídico viaje, presentó en Madrid la «Estrategia mundial para la conservación de los recursos vivos y el logro de un desarrollo sostenido».
La Ministra ha ofrecido a Odile Rodríguez de la Fuente, hija del naturalista que dirige la Fundación que lleva su nombre, la colaboración del Ministerio en los trabajos por la custodia del territorio, la convergencia entre lo rural y la naturaleza, y entre la cultura campesina y la ecología en los entornos locales. Elena Espinosa ha señalado también que el autor de la biografía que se ha presentado hoy, Benigno Varillas, ha realizado un minucioso trabajo de investigación, analizando los contextos políticos, sociales y culturales de la época en los que se desenvolvió Félix Rodríguez de la Fuente.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.