El Consejo de Ministros aprobó el pasado viernes el Real Decreto-Ley 20/2012 de medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad. Una de las medidas incluidas es el incremento del Impuesto sobre el Valor Añadido, tipo general del 18% al 21%. El reducido pasa del 8% al 10%. El tipo superreducido del 4 por 100, que afecta a bienes y servicios de primera necesidad, se mantiene invariable.

En el sector agrario, la subida del IVA implicará que fertilizantes y enmiendas, productos fitosanitarios, gastos veterinarios y piensos pasarían de tener un IVA del 8% al 10%. La energía y lubricantes, maquinaria agrícola, mantenimiento de material, mantenimiento de edificios, servicios agrícolas pasará de soportar un IVA del 18% a uno del 21%. Los alimentos básicos como el pan, harinas panificables, leche y quesos, huevos, frutas y verduras, hortalizas, tubérculos y cereales mantienen el IVA al 4%.

La modificación de los tipos del IVA implica cambios en el régimen especial de recargo de equivalencia. Los del régimen especial de agricultura, ganadería y pesca pasan del 8,5 por 100 al 10,5 por 100, y del 10 por 100 al 12 por 100.
La entrada en vigor de la subida del IVA se aplicará a partir del 1 de septiembre para que los agentes económicos afectados puedan adaptarse a la norma. Se verá acompañada por una reducción de las cotizaciones sociales en 2013 y 2014.