Las altas temperaturas y falta de lluvias que están asolando EEUU no solo están afectando a los rendimientos de los cultivos, sino que también han provocado la muerte de animales. Al parecer, más de 1.000 terneros han muerto en el Medio Oeste por un golpe de calor, deshidratación o una infección bacteriana tras debilitarse por el estrés provocado por el calor.

La mitad de los más de 24 rebaños afectados, se encuentra en Wisconsin y eran de vacuno de leche.

Los terneros que han muerto tenían entre 2 y 7 días de edad, estaban en el exterior y al parecer, con un deficiente acondicionamiento de ventilación y sombra.