Las emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por la cadena de ganado y carne en Australia disminuyeron en un 65% desde 2005 hasta la actualidad, de acuerdo a un nuevo informe de investigación publicado por la interprofesión cárnica australiana Meat & Livestock Australia (MLA).

Las emisiones de la industria cárnica en Australia representaron el 10,3% del total nacional de emisiones de GEI en 2020. Según el director general de MLA, Jason Strong, la reducción lograda en 2020 se explicó, en parte, por un descenso del censo de ganado vinculado a la sequía previa a 2020.

No obstante, también la reducción de las emisiones se ha debido a un mejor manejo. A través de una iniciativa llamada CN30, que involucra una fuerte inversión en innovación y tecnología, Australia plantea el objetivo de ser neutral en carbono para 2030 y al mismo tiempo mantener la productividad del sector.