La consejera de Agricultura de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, se reunió en Bruselas con el director general de Agricultura de la Comisión Europea, Wolfgang Burtscher, para solicitarle que se flexibilicen los requisitos y se exima a los agricultores de que el 25% de sus ingresos proceda del campo, para que no peligre el cobro de las ayudas de la Política Agraria Común en 2023. El agravamiento de las dificultades productivas como consecuencia del incremento de los costes, sobre todo de la energía como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania, incrementada por la sequía que padece la región, pueden provocar que el año que viene el agricultor activo andaluz, en muchos casos, no alcance el umbral mínimo para optar a las subvenciones europeas.
Crespo también le ha asegurado al Director que es el momento idóneo para replantear la situación y garantizar la soberanía alimentaria. En este sentido, ha agradecido la decisión de permitir que se cultive la superficie que se encuentra en barbecho por normativa de la UE. “En Andalucía, tenemos el 20% en barbecho; ahora podemos producir girasol o cereales para nuestros ganaderos, fundamentalmente”, ha añadido.
La aplicación de la estrategia de la Granja a la Mesa va a restar un 10% de posibilidades al campo andaluz, de ahí que la consejera haya explicado que “necesitamos que se aplace” para no empeorar la situación. “Los agricultores andaluces son los primeros en utilizar prácticas medioambientales. No olvidemos que Andalucía es la primera comunidad en agricultura ecológica con un 29,7% de superficie. Pero necesitan tiempo y dinero en estos momentos dificultosos”, ha agregado.
Barra libre para los caza primas, ESO ESLO QUE PIDEN DESDE ANDALUCIA.
Joder, joder, joder. Con la que está cayendo y la que nos espera y esta gente pensando en tragar y tragar y tragar.
Serán lo suqe iban a caballo en la manifetación del día 20. ¿Cuando va a cambiar este país?