Alberto Herranz, director de la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (INTERPORC), ha destacado la “ejemplar respuesta en la actividad de las granjas y empresas del sector porcino de capa blanca español durante estos días, en los que el nivel de oferta y demanda es el habitual, salvo productos como el cochinillo que sí se está viendo afectado al ser un producto altamente dependiente del canal HORECA, o fabricantes de productos elaborados sobre todo de jamones, pero estamos solicitando medidas al Ministerio de Agricultura, para paliar este efecto”.

En lo que respecta al comercio exterior, “la demanda por parte de otros países no se ha visto alterada y las exportaciones siguen funcionando con normalidad”. Así, en China, que supone el 27% de las exportaciones en volumen y el 23% en valor, “la actividad vuelve a la normalidad, los importadores chinos están ahora intentando anticipar lo máximo posible sus compras exteriores, la situación en los puertos chinos se normalizó a finales de febrero y la demanda continúa”.

Herranz ha señalado que “existe preocupación por la salud de nuestros trabajadores que tienen que seguir en sus puestos de trabajo, pero las granjas y empresas cámicas están velando por su salud y por eso tienen sus propios planes de contingencia para proteger al personal frente al Coronavirus, en los que se contemplan iniciativas como reducir los grupos en contacto, hacer turnos diferenciados y que no haya contactos entre turnos ni entre departamentos o grupos de personas”.

Asimismo, “todas las empresas cárnicas han incrementado aún más los controles para reforzar la seguridad y calidad alimentaria y están cumpliendo estrictamente los protocolos de las autoridades sanitarias para la prevención y protección contra el Coronavirus y poder mantener así la actividad en todos los eslabones de la cadena de producción”.