Australia lleva ya 3 años sufriendo una insistente sequía. En los últimos 18 meses, la situación se ha recrudecido y una gran parte de los estados de Nueva Gales del Sur y Australia del Sur, así como zonas del norte y el oeste han registrado una precipitación históricamente baja, según la Oficina Australiana de Meteorología (BoM). Septiembre es de por sí, un mes seco pero este año han caído un 40% menos de lluvia de lo habitual.

Por este motivo, el gobierno australiano ha anunciado ayudas por 1.000 millones de dólares australianos, unos 623 millones de euros. Esta ayudas consisten en préstamos subvencionados.

Se podrán solicitar créditos de hasta medio millón de dolares australianos (311.000 €) pagaderos en 10 años. En los dos primeros años no se pagará nada. Del año 3 al 5 se pagarán intereses y del 6 al año 10, se pagarán intereses y capital.

Los ganaderos han visto como sus costes de producción han aumentado por la falta de lluvia, teniendo que pagar el coste de bombear agua o aportar alimentación concentrada. Muchos han optado por vender parte de su ganado o dejar sus tierras en barbecho. .