Las previsiones del aforo citrícola en la Comunidad Valenciana situaban la cosecha algo por encima del 20% respecto a la campaña anterior, hasta alcanzar casi los 3.900.000 toneladas. Sin embargo, tras los episodios de sequía del año y los fenómenos meteorológicos de finales de 2016 y comienzos de 2017 se han traducido en una cantidad importante de producción que no se ha comercializado y que se estima puede llegara a las 600.000 toneladas, de acuerdo con los datos que se han barajado en la reunión de la Mesa de la Cadena Agroalimentaria.

Igualmente, en el transcurso de la reunión se ha reflexionado sobre el inicio de la campaña de la fruta de verano. Las previsiones de cosecha de fruta de hueso en 2017 para la Comunitat Valenciana son optimistas en cuanto a producción, con volúmenes superiores a los de los últimos años, hasta un 50% por encima de la media del útlimo quinquenio. La campaña se ha iniciado con cotizaciones similares o superiores a las de otras campañas, pero ha descendido a partir de la segunda quincena de mayo, con la entrada en producción de otras zonas productoras que ha saturado los mercados. No obstante, la situación tiende a normalizarse con la activación de la demanda en los países consumidores.