Más de medio centenar de personas ha solicitado una de las 20 plazas disponibles en la séptima edición de la Escuela de Pastores de Andalucía, que organiza la Junta de Andalucía y que en esta ocasión se desarrollará en Santiago-Pontones (Jaén). Esta acción formativa, que en 2017 se centra en la tradición trashumante, tiene como objetivo principal el fomento del necesario relevo generacional en el campo. Asimismo, también contribuye a dignificar y mejorar el reconocimiento social del pastoreo, a mantener la razas autóctonas en peligro de extinción y a conservar los espacios naturales, ya que la ganadería extensiva realiza una importante labor en el mantenimiento del paisaje y de las áreas cortafuegos, ayudando a prevenir incendios.

Con 34 peticiones (casi el 67%), la mayoría de los interesados procede de la provincia jiennense, destacando especialmente el municipio donde se celebra este año la escuela (25 solicitudes). Le siguen Granada (10), Sevilla (2), Córdoba (2) y Almería, con un único interesado en participar. A éstas se suman, además, dos peticiones enviadas desde la Comunidad Autónoma de Madrid.

En cuanto a género, la mayoría de las 51 solicitudes presentadas se corresponde con hombres (43 peticiones, que suponen el 84%) frente a una menor demanda por parte de mujeres (8).

En total, el curso consta de 540 horas lectivas teórico-prácticas. A las 300 horas de clases en el aula se añaden otras 240 horas de prácticas en explotaciones ganaderas, donde los alumnos de la escuela cuentan con un ganadero profesional que ejerce de tutor.

En la organización de la Escuela de Pastores de Andalucía 2017 colaboran entidades públicas y privadas entre las que se encuentran las Consejerías de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural y de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, la Asociación Nacional de Criadores de Ovino Segureño (Ancos) y el ayuntamiento de Santiago-Pontones.