El Presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera y la Consejera de Agricultura, Milagros Marcos, se desplazaron ayer a París para entrevistarse con el director general de Relaciones Exteriores del Grupo Lactalis, Michel Nalet, y buscar una solución al anunciado cierre de la planta de Lauki en Valladolid.

En declaraciones a los medios, posteriores a la reunión, Milagros Marcos ha avanzado que Lactalis ha mantenido una postura muy cerrada y poco flexible a la posibilidad de no cerrar la planta a pesar de que desde la Junta se ha argumentado en relación con el compromiso laboral de los 85 trabajadores de Lauki, la posición estratégica de la fábrica con respecto a Madrid, principal mercado de Lauki, la calidad del producto elaborado, la rentabilidad de la fábrica y las opciones de crecimiento que podrían contar con el apoyo a la modernización de la administración autonómica.

Marcos ha señalado que dado que Lactalis se ha mantenido totalmente hermética a reconsiderar su decisión de no cerrar la fabrica a pesar de los argumentos esgrimidos, se ha avanzado en una segunda línea de negociación, la de posibilitar la venta de la planta a otros posibles compradores interesados, tanto del sector lácteo como de otro sector. En un principio, la empresa siempre se ha mantenido contraria a vender la planta a un competidor, pero tras el encuentro de ayer, Lactalis se ha mostrado más favorable a reconsiderar su posición al respecto.

La Consejera también ha indicado que le han pedido a Lactalis que mientras se resuelve el futuro de la planta, se paralice el expediente de regulación de empleo que en este momento está abierto.

Está previsto que el lunes próximo, el Presidente Herrera remita a la empresa Lactalis un escrito con los tres puntos que desde Castilla y León se demandan: reconsiderar no cerrar la planta, reconsiderar venderla a otro comprador y paralizar el expediente de regulación de empleo.