Unión de Uniones considera que la Orden AAA / 1511/2014, de 1 de agosto, por la que se homologa el contrato tipo de integración de la avicultura de carne, es contraria a la Ley 2 / 2000, de 7 de enero, reguladora de los contratos tipo de productos agroalimentarios, y a la Ley 2/2005, de 4 de abril, de contratos de integración. Por ello, interpuso en noviembre del pasado año, un recurso contencioso administrativo en la Audiencia Nacional.

La Unión de Uniones ha denunciado que la Organización Interprofesional de la Avicultura de Carne del Reino de España (Propollo), Asaja, Coag, UPA y el Ministerio de Agricultura inducen a error a los productores integrados al homologar un contrato tipo que no se corresponde a ningún «tráfico comercial de productos» (requisito de la Ley -estatal- 2/2000), ya que no se comercializa ningún producto, sino que corresponde a una colaboración con prestación de servicios.

Entre otras cosas, desde la Unión de Uniones no se entiende, ni se admite, que se penalice la bajada de la energía. Además, la organización cree que no queda nada claro el sistema que cuantifica el bienestar y calidad de las aves, en función del cual, los avicultores ya han empezado a recibir bonificaciones o penalizaciones.