Durante el primer trimestre de 2012, la oferta y la demanda de carne de porcino ha encontrado un cierto equilibrio, lo que ha resultado en un precio estable, según el índice que elabora el Rabobank con los precios de 5 países. Esta estabilización, junto con un cierto descenso de los precios de la alimentación animal, ha permitido que la industria recuperara parte de los márgenes perdidos en los dos años anteriores. Sin embargo, a nivel del ganadero, los precios de los cerdos han alcanzado precios inferiores a los esperados por lo que todavía no han podido recuperar márgenes.

En este primer trimestre del año es destacable que ha habido numerosas prohibiciones de importación, que sin entrar a valorar la legitimidad de las mismas, han perjudicado la subida de precios del porcino, al fomentar un aumento de oferta en los países que han sufrido las restricciones. Destacar que las cabañas o se han mantenido en declive o han pospuesto la expansión, según los casos.

En el Hemisferio norte, la demanda interna y la exportación van a ser los factores determinantes de los próximos meses. En la UE, mientras que los precios al detalle están subiendo mientras que la crisis está minando el poder adquisitivo de los consumidores. En EEUU, los precios al consumo aumentan mientras que se reducen al ganadero.

En China, EEUU y Rusia, los precios del porcino se han reducido debido a la mayor disponibilidad provocada por una menor demanda en los países en desarrollo. En China esta mayor disponibilidad es consecuencia de una rápida recuperación de la producción, en EEUU de un esperado descenso que no se ha llegado a materializar y en Rusia, de nuevas inversiones para aumentar la capacidad y de mayores importaciones.

En la UE, los precios están estabilizados debido al descenso de la demanda y de las exportaciones, mientras que en Brasil han experimentado un inesperado incremento en enero debido a una reducción estacional más elevada de la prevista.

La segunda mitad de 2013 va a estar condicionada por el creciente relieve de las importaciones chinas y rusas junto con una creciente dependencia en las exportaciones de los mercados de EEUU y la UE. Según el informe de Rabobank, se prevén dificultades de mercado en la primera mitad del año y mejores precios en la segunda mitad.