A pesar de que ASAJA de Castilla y León ha valorado como un paso en la dirección correcta el convenio suscrito por el Ministerio de Agricultura, 14 industrias lácteas y 9 empresas de distribución que controlan en un porcentaje muy alto el mercado de la leche en nuestro país, el presidente de la organización, Donaciano Dujo, ha recordado que “el éxito de convenios y contratos se mide de una única manera: si sube el precio que se paga al ganadero por el litro de leche”.

Esta mañana el presidente de la principal OPA de la Comunidad Autónoma visitaba una explotación de vacuno de leche puntera, la Finca Santa Cruz, ubicada en Ribas de Campos (Palencia). El sentir de los productores de leche, tras varios años de pérdidas continuas de alrededor de 2-3 céntimos por litro, es por un lado expectante, “porque la situación del vacuno lechero es tan dramática que parece que responsables políticos, industria y distribución son por fin conscientes de que si no hacen algo, y pronto, se puede liquidar el sector y perder nuestro país un potencial productivo que no se puede recuperar, y saben que algo hay que hacer”, señala Dujo. Pero por otra parte, los ganaderos tienen muy claro que ni convenios, ni contratos “son una llave mágica si no está detrás un precio digno que permita seguir produciendo con una rentabilidad mínima, y no perdiendo dinero”, puntualiza el responsable de ASAJA de Castilla y León.

En la visita a la moderna explotación, que a pesar de los envites sigue apostando por invertir y mejorar, Donaciano Dujo ha subrayado que los ganaderos de Castilla y León “han probado a base de sufrimiento que son muy competitivos, porque si no es imposible que hayan podido seguir mejorando sus datos de productividad en el peor de los marcos posibles”. Por ello, la organización agraria pide ahora “la máxima responsabilidad y compromiso tanto a Silvia Clemente como a Miguel Arias para que se empleen a fondo para sacar al sector de atolladero, si es que no quieren pasar a la historia como la consejera y el ministro bajo cuyos mandatos se dejó de producir leche en esta tierra”, apunta Dujo.