Summers Poultry Products, una empresa del Reino Unido, gestionada por la familia Summers ha sido multada con 195.000 € por incumplimiento de normas municipales de planificación urbanística.

El caso se inició en 2007, cuando la empresa construyó dos nuevas edificaciones, una de ellas una unidad de frio, al lado del matadero existente. Según la empresa esas construcciones eran necesarias par cumplir con la normativa del Departamento de Asuntos Rurales (DEFRA). La autoridad local rechazó las construcciones por considerar que no tenían los permisos necesarios y no cumplían las normas municipales. El caso terminó en los Tribunales.

La organización agraria NFU apoya a la empresa. Defiende que las obras de ampliación eran imprescindibles, ya que eran exigidas por el DEFRA con el fin de cumplir la normativa vigente. Si no se hubieran hecho, el DEFRA habría cerrado la explotación, dejando 96 personas en la calle. Sin embargo, la realización de las mismas les ha enfrentado a una multa millonaria, que podría condicionar la viabilidad de la empresa.

Las instalaciones llevan en el pueblo de Tanworth-in-Arden desde 1967 y la propiedad de las mismas se ha mantenido en la misma familia pasando de generación en generación.