Los datos del panel de consumo alimentario para el canal alimentación, publicados por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) y analizados por el Observatorio Español del Mercado del vino (OeMv), muestran una caída, durante los nueve primeros meses del año, del 3,1% en volumen, hasta los 294,6 millones de litros, y del 2,2% en valor, hasta los 663,5 millones de euros. No obstante, si tan sólo comparamos el mes de septiembre de 2011 con el del ejercicio precedente, el consumo de vino obtiene crecimientos del 1,6% en volumen y del 3,2% en valor, siendo datos positivos por segundo mes consecutivo. En definitiva, las cadenas de alimentación continúan siendo el mayor distribuidor por volumen en nuestro país, según se subrayó en el estudio ‘Modelos de Distribución del Vino en España’, presentado la semana pasada por el OeMv y que ya está disponible en nuestra web.

Durante los tres primeros trimestres del año, las pérdidas están lideradas por los vinos tranquilos, tanto con denominación de origen protegida como sin ella. Los primeros caen hasta los 95,9 millones de litros por valor de 332,8 millones de euros, lo cual significa un descenso del 2,4% en volumen y del 3,1% valor. Los vinos tranquilos sin DOP decrecen hasta los 162,8 millones de litros por los que se facturaron 179,2 millones de euros. En el lado positivo, aumenta el consumo de vinos espumosos y cavas, un 7,7% en volumen hasta los 14,5 millones de litros, y un 9,4% en valor hasta los 69,1 millones de euros.

En términos interanuales, entre octubre de 2010 y septiembre de 2011, el consumo en hogares ha caído un 6,8% en valor, hasta los 1.045,3 millones de euros, y un 5,2% en volumen, hasta los 425,3 millones de litros, con bajadas generalizadas en todos los productos. Resulta significativo el caso de los espumosos y cavas: a pesar del repunte que se observa durante este 2011, debido a su mala evolución durante el año pasado, pierden un 13,2% en valor y un 7,9% en volumen, en cifras interanuales.

Si se compara el consumo de vino con el de otras bebidas se observa que durante estos primeros nueve meses del año, las espirituosas y los zumos evolucionan peor que el vino. La cerveza crece un 2,3% tanto en valor como en volumen y sigue sorprendiendo el extraordinario crecimiento de la categoría ‘otras bebidas con vino’, donde el MARM incluye las sangrías y tintos de verano, y que aumentan un 16,6% en valor y un 20% en volumen de enero a septiembre de este año.