Quedan menos de dos meses para que entre en vigor la directiva de bienestar de las gallinas ponedoras, y todavía no se sabe que se va hacer con los huevos fuera de norma, es decir, los que procedan de explotaciones que no se han adaptado y todavía tengan gallinas en jaulas convencionales.
El Comisario europeo de Salud Pública, John Dalli, tiene dos cosas claras, que la aplicación de la directiva no se va a posponer y que no se van a destruir los huevos que no cumplan. Sin embargo, lo que no está claro es el destino que se le van a dar a estos huevos.
La pasada semana tuvo lugar en Bruselas una reunión entre las autoridades comunitarias y representantes de las administraciones de los Estados miembro, con el fin de poder consensuar el fin de estos huevos, pero no fue posible llegar a un acuerdo.
El Comisario Dalli propone que los huevos que no cumplan no se destinen a consumo directo, sino que solo puedan dedicarse temporalmente, a la producción de huevo líquido o huevo en polvo para su utilización en alimentos y productos no alimenticios (como por ejemplo, champú). La transformación de los huevos en huevo líquido o en polvo tendría que realizarse en el estado miembro que no cumple y los alimentos y no alimentos que contengan estos huevos deberían destinarse a su consumo dentro del país que no cumple o exportarse a terreceros países, pero no a otros países de la UE.
Las opiniones están muy divididas entre los países que cumplen y lo que no. Los primeros consideran que esta solución transitoria solo perjudica a los que han cumplido en plazo. Además, ven poco factible que se pueda llevar a cabo esta medida porque los países que no cumplen no tienen suficiente capacidad de transformación de huevos a líquido o a polvo. Asimismo, podrían darse muchos casos de fraude, es decir, de huevos que en lugar de ir al uso industrial, fraudulentamente fueran destinados a huevo de mesa. Creen que dar una solución transitoria es alargar el problema y no darle solución.
Por el contrario, los países que no cumplen o que no saben a ciencia cierta si la gran mayoría de sus explotaciones van a cumplir, esperan de Bruselas una solución alternativa a la destrucción de huevos.
La Comisión si ha indicado que a partir del 1 de enero de 2012 iniciará las inspecciones y multará a las explotaciones que no cumplan con el fin de que o se adapten o dejen el sector.
Algunos países ya llevan tiempo aplicando la directiva, como Suecia (1999), Luxemburgo (2007), Austria (2009) y Alemania (2010) y han notificado a la Comisión una conformidad del 100 % con la legislación.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.