La Comisión Europea ha enviado a España una opinión razonada por no haber aplicado correctamente la normativa del transporte animal y de los controles oficiales. Una inspección de la Oficina Veterinaria y Alimentaria de la UE (FVO) realizada en España puso de manifiesto que las autoridades españolas incumplen de manera sistemática y persistente dichas normas.

La misión de la FVO tuvo lugar entre finales de marzo y primeros de abril del año pasado. Se visitaron 7 mataderos de Extremadura y 4 de Castilla-León, así como un centro de agrupamiento en Extremadura, donde las ovejas eran cargadas para un viaje de menos de 8 horas.

Las principales deficiencias detectadas se refieren a las autorizaciones de los transportistas, la aprobación de los medios de transporte, los registros de viaje, la aptitud de los animales para el transporte y las sanciones y las inspecciones. Además, la Comisión estima que España no aplica de una manera efectiva, la obligación de verificar la eficacia de los controles oficiales en lo que respecta al transporte de animales.

Las autoridades españolas disponen de dos meses para cumplir con el dictamen motivado. Si después de este período, no toman las medidas apropiadas para rectificar la situación, la Comisión podría someter el asunto ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.