Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Castilla-La Mancha consideramos que la medida adoptada esta mañana tras la reunión de la Mesa Nacional del Vino, supondrá un importante alivio para los miles de viticultores de la región que dependen de este cultivo para su subsistencia.

Tras la reunión mantenida en la sede del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, llamó ayer al presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, para confirmarle que el Ministerio va a atender su petición de retirar del mercado dos millones de hectolitros de vino.

En el transcurso de la jornada se ha acordado asimismo establecer una medida excepcional para la obtención del alcohol de uso de boca que viene a sumarse a las medidas ya contempladas con este fin.

El precio fijado para la destilación es de aproximadamente 1,85 euros por hectógrado y el presupuesto necesario saldrá de la ficha financiera de la OCM del vino.

Para UPA con esta medida se logra dar una tregua a la complicada situación que están atravesando los viticultores castellano-manchegos. Por ello confiamos que tanto desde el Ejecutivo de José María Barreda como desde el Gobierno nacional se siga trabajando en la línea de reconocimiento del trabajo y de la importante labor que realizan los agricultores y ganaderos de este país.