Un estudio llevado a cabo por investigadores iraníes ha puesto de manifiesto que los broilers prefieren la cama de arena, pero que el tipo de cama no influye en su rendimiento.

Se realizaron dos experimentos con pollitos que se criaron del día 1 al 42, durante el verano a 31ºC. En uno de los experimentos, 300 pollitos (Ross 308) se asignaron de manera aleatoria a uno de 20 corrales, de los que 4 no tenían cama, otros 4 tenían virutas de madera, otros 4 arena, otros 4 cáscara de arroz y otros 4 rollos de papel reciclado. Los resultados mostraron que los pollos criados en cama de cáscara de arroz tenían peor peso corporal y peor nivel de ingesta de alimento. En el resto de camas no se observaron diferencias en la conversión del alimentos, el rendimiento de la canal y la grasa abdominal.

En el segundo experimento, cuatro corrales se dividieron en 4 cuartos, y en cada cuarto se puso arena, virutas de madera, cáscara de arroz o rollos de papel. Se colocaron 20 aves por corral y se observaron 10 veces al día, un día por semana durante las semanas de la 2 a la 6. Los pollos pasaron el 49% de su tiempo en la arena, el 19% en las virutas de madera, el 18% sobre el papel y el 13% en la cáscara de arroz. El tiempo dedicado al baño de polvo fue mayor en la cama arena. El tiempo dedicado a estar sentados fue mayor en la cama de arena y de virutas. El tiempo dedicado a andar fue mayor en la cama de cáscara de arroz y de papel reciclado.

Estos resultados indican que los pollos tienen igual desarrollo si se crían sin cama sobre suelo o con cama de arena o con cama de papel reciclado o con cama de virutas de madera y que entre todos los tipos de cama probados prefieren la de arena.