En el primer debate en el Consejo de Ministros de Agricultura de la UE sobre el documento de la Comisión sobre la reforma de la OCM del vino ha habido un acuerdo general sobre que existe necesidad de acometer una reforma, dada la problemática existente (reducción del consumo, aumento de excedentes, competencia de países terceros) y que esta debe estar orientada principalmente a mejorar la competitividad de los vinos europeos.

No obstante, los países productores se oponen en general a que el eje principal de la reforma sea el arranque de viñedo, al menos en la magnitud que sugiere la Comisión de un programa de 400.000 ha en 5 años.

Tras unos meses de debate, la Comisión formulará su propuesta formal de reforma a últimos de 2006 o primeros de 2007.