18 de abril de 2005. La Conferencia Sectorial, celebrada este lunes en Palma de Mallorca, ha avanzado en el contenido del Plan de Reestructuración del Sector Lácteo del MAPA, que había sido informado por la Comisión Sectorial del pasado día 8 de abril, y que cuenta con el apoyo de la mayoría de las Organizaciones Agrarias que han intervenido de forma activa en su elaboración.

Este Plan, que supone un cambio de sistema en el régimen de cuota láctea, está orientado a incrementar la competitividad de las explotaciones de leche, de forma que, al mejorar su renta, puedan enfrentarse con éxito a la reforma de la PAC.

Tiene como objetivo fundamental, evitar la desaparición de las explotaciones lecheras, cuyo número ha descendido de manera alarmante en los últimos años a causa de una progresiva liberalización en el sistema de compra-venta de cuotas en España.

Es un Plan de carácter nacional, dirigido al conjunto del sector lácteo, que busca la transparencia y el fin de la especulación del mercado de cuotas, reduciendo su precio. Asimismo, se trata de poner cuota a precios asequibles a disposición de las explotaciones que lo necesiten.

El Plan pretende también proteger la producción de leche en zonas de montaña, desfavorecidas o con pocas alternativas económicas y aprovechar el próximo periodo, último en el que la cuota llevará el derecho a la prima láctea.

El MAPA, con este Plan, trata de conseguir un sector lácteo fuerte y viable impidiendo la desaparición de más explotaciones, lo que supondría una pérdida de tejido rural con consecuencias negativas para el territorio y el medio ambiente.

El Plan se basa en dos pilares. El primero consiste en un programa nacional de abandono de la producción láctea, financiado a través de los Presupuestos Generales del Estado, con el que se alimentará la reserva nacional y por el que sustituirá provisionalmente la compraventa de cuotas en el mercado. La indemnización por kilogramo de cuota láctea será de 0,50 euros e idéntica para todos los solicitantes.

El segundo, es el reparto de las cuotas que se recuperen a través de un fondo nacional coordinado de cuotas lácteas. La reserva nacional es el único mecanismo con el que cuenta el Estado para distribuir ciertas cantidades de cuota y reordenar el sector conforme a criterios generales de política económica. Así, las cuotas se asignarán con criterios comunes, de forma que pueda darse el apoyo necesario a las explotaciones que se juzguen prioritarias con independencia del territorio en el que estén ubicadas.