Se acaba de publicar el reglamento 184/2005 que introduce los requisitos en materia de higiene de los piensos. El objetivo del mismo es realizar una revisión general de los requisitos de seguridad e higiene, armonizándolos a nivel comunitario y de cara a que sean cumplidos por las importaciones, con el fin de garantizar un nivel más elevado de protección de la salud humana y animal.

El reglamento establece que las empresas del sector son las principales responsables de la seguridad de los piensos, por lo que es imprescindible contar un sistema de registro y autorización de todas las empresas de piensos por parte de las autoridades competentes de los Estados miembros. De esta forma se podría garantizar la trazabilidad de los productos desde el fabricante hasta el usuario final y facilitar la realización de controles oficiales eficaces.

Para aquellas actividades que puedan entrañar un riesgo, se ha optado por mantener un sistema de autorizaciones y se ha previsto disposiciones para la suspensión temporal o permanente de las mismas.

El sistema de análisis de peligros y puntos críticos de control (HACCP) junto con la aplicación de buenas practicas en materia de higiene, se consideran los pilares básicos del reglamento, el cual también entra a definir criterios microbiológicos.

Con el fin de dar tiempo a las empresas a poder cumplir los nuevos requisitos, éstos entrarán en vigor a partir del 1 de enero de 2006.