Sevilla, 28 de septiembre de 2004. Este año la campaña ha comenzado con diez días de retraso con respecto al año anterior. Se inició el 3 de julio con la recogida de las variedades más tempranas como Early Cardinal y finalizó el pasado 15 de septiembre con la recolección de las variedades más tardías como Red Globe.

La producción se ha visto reducida en un 50%, descendiendo aproximadamente hasta los 7 millones de kilos frente a los 14 millones del año anterior. A esta reducción hay que añadir el elevado porcentaje de uva de mala calidad que se ha tenido que destinar a lagar.

Los precios alcanzados han sido muy bajos (entre 0,27 y 0,33 €/kg) . En cuanto a la uva destinada a lagar, como consecuencia de su mala calidad, el precio ha rondado los 0,15€/kg.

Los factores que han influido en la reducción de la producción han sido diversos. Así, las continuas precipitaciones durante la floración del cultivo y las altas temperaturas durante los meses de julio y agosto han provocado una merma en la calidad de la uva al acelerar la maduración y provocar la pudrición y flaccidez de los racimos. Además hay que añadir la grave incidencia del mildiu que ha atacado a las viñas de forma muy agresiva provocando la pérdida de buena parte de la cosecha y reduciendo la calidad de la uva.

Todo esto, junto a la grave crisis que afecta al sector en los últimos 4 años debido a los bajos precios que perciben los agricultores, va a provocar una paralización de la modernización que se está llevando a cabo en este cultivo y pone en peligro a más de la mitad de las explotaciones actuales.