En la reunión mantenida ayer entre los representantes de la Comisión y de las autoridades rusas se llegó al acuerdo de que Rusia aceptaría los actuales certificados veterinarios hasta el 1 de enero de 2005. No obstante, los nuevos certificados unificados serán introducidos a partir del próximo 1 de octubre.

El problema con Rusia se inició el verano de año pasado, cuando se negoció un acuerdo veterinario. Las autoridades rusas exigían que se estableciera un certificado armonizado para todos los productos de origen animal destinados a su país.

También pedían que la Comisión garantizara todas las exportaciones comunitarias, de acuerdo con las exigencias sanitarias y veterinarias rusas, en contra de la situación actual, en la que son los Estados miembros, los competentes.

A falta de un acuerdo sobre los certificados veterinarios, las autoridades rusas adoptaron el pasado 1 de junio como fecha para impedir las exportaciones de productos animales procedentes de la UE, de forma unilateral. Esta prohibición pudo ser levantada al cabo de una semana por la intervención de la Comisión, al más alto nivel.