La Comisión Europea ha adoptado una propuesta al Consejo de Ministros de la UE para la aprobación de la comercialización en la UE del evento OMG de maíz NK603, transformado genéticamente para tolerancia al herbicida glifosato.

Esta propuesta se produce al no haber mayoría a favor o en contra en el Comité Permanente de la Cadena Aliementaria sobre esta cuestión. El Consejo de Ministros deberá votarla en el plazo de tres meses. Si tampoco hubiera acuerdo en un sentido u otro dentro del Consejo, la decisión quedaría finalmente en manos de la Comisión Europea, que lógicamente decidiría a favor de su propia propuesta, lo mismo que ha sucedido recientemente con el maíz Bt11.

El mecanismo de aprobación de nuevos OMG es teóricamente de carácter técnico y se supone que el Comité debería tomar sus decisiones directamente sobre los informes científicos de seguridad alimentaria y medioambiental de los organismos de la UE, favorables la aprobación. No obstante, el asunto continúa fuertemente condicionado por asuntos políticos que nada tienen que ver con la seguridad alimentaria ni con la protección del medio ambiente, y de ahí que se produzca esta situación atípica de que una cuestión técnica (el si estas transformaciones son o no seguras para la salud o el medio ambiente) se transforme en un asunto político (el si interesa o no políticamente a los gobiernos su aprobación) y sean los ministros quienes tengan que decidir sobre este asunto, o escurrir la decisión a la Comisión Europea.

El maíz tolerante a herbicida supone un control más simple de las malas hierbas y unos menores costes de producción, fomentando las técnicas de laboreo de conservación, que reducen la erosión y el consumo de agua.