29 de enero de 2004.- la unió-coag denuncia que el Ministerio de Agricultura, con el visto bueno de las comunidades autónomas, pretende sacar adelante una normativa de regulación de ayudas al sector de frutos secos que deja la puerta abierta para que ambas administraciones no tengan que complementar con dinero propio las ayudas europeas para este sector. Este año entraba en vigor un nuevo sistema de ayudas permanentes para el sector de frutos secos con la aportación de fondos desde la UE, los estados miembros y las comunidades autónomas.

El compromiso al que había llegado el Ministerio de Agricultura con el sector de frutos secos era que la Unión Europea aportaba el 50% de las ayudas, el Ministerio de Agricultura un 25% y las respectivas comunidades autónomas el 25% restante, hasta llegar a la cantidad de 137 millones de € correspondientes a la Superficie Nacional Garantizada otorgada por la UE al estado español que asciende a 568.200 hectáreas.

Sin embargo, el proyecto de Real Decreto, presentado por el Ministerio de Agricultura esta semana al sector, pretende que el presupuesto de las ayudas a los frutos secos se cubra íntegramente desde Bruselas, viéndose disminuidas en unos 60 €/ha las ayudas complementarias que podrían recibir los agricultores de la Comunidad Valenciana.

Joan Brusca, secretario general de la unió-coag, afirma que “el MAPA en vez de utilizar el presupuesto de frutos secos para mejorar la renta de los agricultores, lo usa como un simple ahorro para los presupuestos generales del estado y para las CCAA”.
Brusca dice que “desde el sector sólo podemos mostrar nuestro rechazo más rotundo a la propuesta del Ministerio y exigimos que la retire. En este sentido hemos remitido un escrito a la consellera de Agricultura, Gema Amor, para que la Comunidad Valenciana se oponga al nuevo reparto de ayudas”. El secretario general de la unió apuesta “porque se cumpla el “espíritu” del Reglamento de la UE 1782/2003 que regula un sistema permanente para los frutos secos (almendra, algarroba y avellana), que no es otro que asegurar la renta de los productores así como preservar la calidad de los frutos secos”.

La unió-coag recuerda también que cuando se publicaron en 1990 las ayudas de los planes de mejora para frutos secos, se estableció la ayuda por hectárea en 242,61 euros. Si actualizáramos esa cantidad a fecha de hoy, para mantener el mismo nivel de apoyo que en el año 1990, se debería ayudar a los productores de frutos secos con 373,38 euros/hectárea. Por tanto, con estos últimos datos todavía resulta más lamentable la actitud del Ministerio de Agricultura y la connivencia de las Comunidades Autónomas.