Según un estudio de la Universidad de Illinois, la distribución regional de la producción y transformación de soja a nivel mundial está cambiando rápidamente, en el sentido de que Estados Unidos está perdiendo su posición hegemónica a favor de otros países, principalmente de Sudamérica.

Desde principios de los años 90, la producción de EEUU que era el 50% del total mundial ha descendido al 40%, Mientras que las cuotas de Brasil y Argentina han subido al 25% y al 15% respectivamente. La última campaña y por primera vez Brasil igualó prácticamente a EEUU en cuanto al volumen de exportaciones. El sector de la transformación ha sufrido un cambio similar de la mano de las industrias que están ya invirtiendo en las zonas de expansión de la soja en Sudamérica.

Por su parte, la industria norteamericana se está reorientando en mayor medida hacia el consumo interno en la alimentación animal y a los productos diferenciados de mayor valor añadido como aislados, proteínas, isoflavonas, harinas y aceites especiales.