En Francia se ha producido cierto revuelo en relación con los pesos al sacrificio de los cerdos. Algunos grupos mantienen que si durante el invierno se hubieran reducido estos pesos, se habría disminuido la oferta de carne, con lo que se habría evitado las actuales bajadas en las cotizaciones. El Mercado Porcino Bretón está en desacuerdo con estas afirmaciones y ha respondido a las mismas.
 
Ha indicado que las distintas crisis que se han producido en los últimos años han venido motivadas por factores que variaban según el momento y que no estaban relacionados con el peso de las canales. De hecho recuerda, que si bien que en la crisis actual los pesos de la canal se encuentran entre los 89,5 a 90 kg, en las crisis anteriores, los pesos eran muy inferiores y sin embargo no evitaron la crisis. Así por ejemplo, en la crisis de 87/88 el peso canal era de 83,5 85,5 kg, en la crisis 93/94 de 86,5 a 87,5 kg y en la de 98/99 de 87,5 kg.
 
Asimismo, el Mercado Porcino Bretón ha expuesto que si actualmente el peso medio de la canal está en 89-91 kg es porque los ratios técnico-económico así lo sugieren. Recuerda que los costes por kilo-canal aumentan un 1,7 céntimo de euro cuando el peso de la canal pasa de 86,2 kg frío a 84,2 kg frío. Los costes aumentan 3,4 céntimos de euro cuando el peso de la canal disminuye en 4 kg. En consecuencia, el Mercado Porcino Bretón considera que para hacer frente a las crisis, no solo es necesario defender buenos precios sino también tener menos costes de producción. Reducir el peso de la canal habría provocado más costes de producción por lo que habría sido peor el remedio que la enfermedad.